En Perspectivas Contemporáneas sobre las Identidades Lésbicas, Gays y Bisexuales [Contemporary Perspectives on Lesbian, Gay, and Bisexual Identities], editada por D.A. Hope, Springer 2009
¿Qué es la Orientación Sexual? ¿La tienen las Mujeres?
J. Michael Bailey
La investigación reciente ha concentrado atención creciente en las diferencias entre sexos en la expresión de la sexualidad, incluida la orientación sexual (e.g., Baumeister, 2000; Diamond, 2003). Hay un consenso emergente en que las elecciones de pareja sexual de las mujeres a veces se hacen por razones diferentes que las razones de los hombres. Por ejemplo, se piensa que las mujeres tienen mayor plasticidad erótica que los hombres, lo que significa que su conducta sexual es más apta para ser moldeada por factores socioculturales (Baumeister). Además, el deseo sexual de la mujer puede ser más “fluido” que el de los hombres, menos rígidamente dirigido a personas de un sexo en particular y más mutable con el tiempo, dependiendo de factores relacionales tales como el apego romántico (Diamond, 2008).
Un fuerte candidato a mecanismo primordial que subyace en estas diferencias es una sorprendente diferencia entre sexos en patrones de excitación sexual (Chivers, Rieger, Latty, & Bailey, 2004; Chivers, Seto, & Blanchard, 2007). Los hombres, pero no las mujeres, tienen una categoría de patrón de excitación sexual específica, que generalmente está dirigida mucho más fuertemente a los miembros de un sexo que a los del otro. Por ejemplo, casi todos los hombres que se identifican como homosexuales se sienten más excitados sexualmente por hombres que por mujeres. En contraste, el patrón de excitación de las mujeres heterosexuales tiende a ser bisexual, y por lo tanto es irrelevante para la mayoría de las elecciones de pareja de las mujeres. Esto es, las mujeres que se identifican a sí mismas como heterosexuales tienden a ser similarmente excitadas por estímulos de varón y de mujer. El patrón de excitación sexual del varón específico por categoría es la primera motivación sexual que dirige la actividad del varón hacia ciertos tipos de individuos (con la máxima frecuencia hacia mujeres, pero a veces hacia hombres) y no a otros. A decir verdad, sostengo que el patrón de excitación sexual de categoría específica del varón es su orientación sexual. La mayoría de las mujeres carecen de esta fuerte motivación direccional, y por lo tanto no es sorprendente que su conducta sexual sea más maleable y sexualmente fluida.
En este capítulo comienzo proponiendo algunas distinciones en definiciones para clarificar qué es lo que la orientación sexual no es. Reseño la investigación sobre el patrón de excitación sexual del varón y argumento a favor de igualar el patrón de excitación sexual con la orientación sexual. A continuación reseño los hallazgos recientes sobre los patrones de excitación sexual de las mujeres y me concentro en algunas preocupaciones metodológicas. Concluyo con una reconsideración de la idea de la orientación sexual de las mujeres.